Sea como sea

7º fecha: GODOY CRUZ 0-1 BOCA JUNIORS

Boca jugó bastante mal. Pero en una jugada cambió la desesperación por un grito y consiguió tres puntos importantísimos. Fiesta en las tribunas. Algunos errores técnicos de Russo. Pero victoria en fin.

Antes del partido se veía un panorama bravo. Rival duro de local, mucha expectativa, presión por todos lados. Y Boca lo sintió mucho.

Ya de entrada, con el partido comenzado, se vio un Boca bastante apresurado, impreciso y con poca eficacia ofensiva. Una que otra llegada peligrosa, incluida una tapada genial del arquero Torrico luego de un cabezazo mortal de Palermo, caracterizaban a un Boca que ya se veía apagado en la primera etapa, donde sufrió ataques mendocinos por las dos bandas en varias ocasiones.

La segunda parte se vio algo cambiante. A diferencia con la casi igualdad futbolística de los dos equipos, Godoy Cruz fue algo superior, más que nada en cuanto a llegadas. Boca no atacaba, no era claro en lo colectivo y sus individualidades más importantes no aparecían como generalmente se espera.

Pero en un momento eso cambió. Fue así como en una jugada bien armada Boca fue más efectivo que nunca y tacazo de Boselli infló los pechos Xeneizes en un sólo grito, en el del gol, para volver con tres puntos que tal vez en algún momento nos acordemos y lo tildaremos de importantísimo.

No se brilló, ni siquiera se jugó bien. Es más, Boca tuvo una floja actuación. Pero aún así, hoy valoramos la victoria, que nos sigue dejando ahí cerca.